Las parafilias son algo muy común de lo que poco se habla debido a que pueden ser consideradas como tabú, sin embargo, conocerlas nunca está de más, incluso puede que descubras que tienes la tuya. A continuación, te hablamos de algunas de las más comunes.
Seguramente más de una vez escuchaste sobre algo llamado “parafilias” pero no comprendiste mucho de qué se trataba realmente. Sin embargo, de alguna u otra forma si sabes que está relacionado con parejas exhibicionistas o que practican algunas actividades fuera de lo convencional. Si este término se te hace familiar pero no lo conoces a la perfección, el día de hoy te lo explicaremos, ya que básicamente comprende a un grupo de fantasías sexuales que son poco nombradas pero más comunes de lo que te imaginas.
Ya no tienen por qué agarrarte desprevenido, aquí aprenderás en qué consisten las parafilias y te presentaremos algunas de las más populares, estamos hablando del exhibicionismo, voyerismo, sadismo, masoquismo, fetichismo, transvestismo y parcialismo, prácticas que puedes encontrar en un bar swinger como Interspa.
Lo que no sabías sobre las parafilias
Si formas parte de parejas swinger probablemente este tema sea interesante para ti, como te mencionamos anteriormente, es un grupo de fantasías sexuales que son totalmente atípicas y que hace que las personas relacionadas lleguen a altos niveles de excitación. No estamos hablando de fantasías sexuales porque estas tienen un patrón sexual de carácter imperativo y pueden generar angustia a quien lo padece.
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Algunas de las parafilias más comunes son: fetichismo transvestista, masoquismo, sadismo, voyeurismo (el cual se puede poner en práctica en un bar sw) o el exhibicionismo. Hoy te hablaremos sobre ellas y quizás descubras que padezcas alguna de estas parafilias.
¿Cuáles son las parafilias más comunes?
• Sadismo
A diferencia del masoquismo, el sadismo es el otro lado de la moneda. Es la parafilia que se basa en la gratificación que siente el otro de causar dolor, ejercer dominación, torturar a la otra persona o humillar. El masoquista y el sádico son la pareja perfecta, ya que el uno se complementa con el otro.
Las prácticas sadomasoquistas son de las más comunes, pero tienen una característica que no puede faltar para que sea mucho más placentera y satisfactoria. El sadismo debe ser consensuado y debe estar acorde al grado de intensidad que los dos hayan acordado con anterioridad. En estos casos, los más comunes son la penetración sin lubricación previa, flagelar las nalgas y espalda de la víctima, atar con cuerdas, torturar pezones y genitales o practicar el bondage.
• Voyerismo
¡Es una de las más comunes! Implica el placer o el disfrute sexual al ver a una persona desnuda o durante el coito, la idea es que esta no se dé cuenta de que está siendo espiada. En algunos casos esto implica un delito contra la intimidad. Por ese motivo, es necesario acceder a lugares donde sea permitido ver sexo en vivo tipo show o en cuartos especializados para eso.
Para considerarlo voyerismo es necesario que las personas que estén haciéndolo no tengan conocimiento sobre quién los ve, o el lugar desde donde lo hace. Para que la persona sea definida con dicha parafilia, es necesario que lo haya hecho previamente en varias ocasiones y esto le genere una satisfacción sexual inigualable. Tiene que ser un acto intencional.
• Fetichismo
El fetichismo, a diferencia de las otras parafilias, son todo un conjunto de conductas, fantasías y necesidades sexuales en las que se siente placer. Por ejemplo, hay algunas personas que ciertos objetos o materiales les produce excitación, como es el caso de quienes sienten orgasmos al tener contacto con el látex, zapatos, el cuero, la lencería, entre otros.
Todo lo que se haga con un objeto o accesorio y genere placer sexual es considerado fetichismo. Hay algunas personas que necesitan frotarse, tocarlo o simplemente verlo para llegar al clímax más alto. Esta parafilia ha llegado a ser tan común que existen páginas web o sitios especializados donde pueden y practicar todos los que deseen. Incluso, hay algunos lugares que venden dichos objetos para que puedan satisfacer sus necesidades de tener un encuentro íntimo.
• Masoquismo
Aquellos que practican el masoquismo son los que sienten placer del dolor o situaciones en las que se humilla tanto física como psicológicamente. Generalmente, son los que tienen relaciones de dominación en los que existe tortura, sumisión y golpes. En este tipo de parafilia se pueden practicar castigos o autocastigos, todo depende de la preferencia de cada cual.
Las relaciones entre placer y dolor son más complejas de lo que podemos creer. En su comprensión es necesario hablar de las sustancias que produce el cerebro y bajo qué estímulos se activa, por ejemplo, hay a quienes les gusta ser azotados con látigos, cachetadas, estimulación láser, quemaduras, calor o frío.
• Exhibicionismo
Se trata de sentir placer al exponer los genitales a personas desconocidas de forma inesperada u oculta. Estas personas que disfrutan del exhibicionismo generalmente ven en este tipo de situaciones una gratificación sexual, les despierta un deseo y una excitación que solo ellos pueden comprender al sentirla. En algunos casos, resultan considerados como un acto ilícito dado que no se encuentran en espacios donde se da apertura a todo tipo de formas de sentir placer como puede suceder en un espacio de experiencias swinger.
Al hablar de un exhibicionista seguramente vienen muchas imágenes a tu mente, y algunos ejemplos que podemos darte que derivan de esta actividad podrían ser: desnudos en eventos públicos, acercamientos que suceden en el aire libre o incluso a través de las nuevas tecnologías, donde puedes compartir material erótico a través de las redes de internet.
• Travestismo
Aunque no es muy mencionado, hay algunos hombres heterosexuales que disfrutan de vestirse con el género contrario, o sea de mujeres, ponerse pelucas, tacones, maquillarse y ponerse senos resulta excitante. Les gusta transformarse. No obstante, no es lo mismo el fetichismo travestista y el travestismo.
El travestismo hace referencia a un sentido general de vestirse de mujer si es hombre, o de hombre si es mujer y sentir placer sexual de hacerlo. Así pues, los drag-queen y los transexuales si se visten pero no de una forma fetichista, sino por una identidad de género.
• Parcialismo
A excepción de los genitales, el parcialismo es el placer sexual en diferentes partes del cuerpo no convencionales. Esto se basa en una parte concreta. Es bastante común y puede manifestarse de múltiples formas; algunas personas sienten placer por los pies, y esto es llamado podofilia, otras por las axilas, más conocido como maschalagnia, el ombligo se conoce como alvinofilia, entre otros.
Básicamente, estas personas ni siquiera necesitan de la penetración para llegar al orgasmo, solo requieren de un par de caricias o alguna estimulación en la parte que les genere placer. Por ejemplo, a quienes tienen sensibilidad en los pies les gustan los masajes y un poco de caricias intensas.
No hace falta asistir a una fiesta swinger para ver este tipo de parafilias; hay parejas que desde un inicio dan a conocer sus fantasías sexuales y esto les permite disfrutarlo en la intimidad. Comparte tus fantasías sexuales con tu pareja, sean parafilias o no. En Interspa puedes hacerlas realidad y aprender más sobre qué es swinger e incluso descubrir fantasías que no sabías que tenías.
¡Te esperamos en nuestro bar swinger!
Artículo tomado de: InterSpa Bar SW